Dios es el autor de la creación
Vaughan Roberts
La Biblia
comienza con la declaración: "Dios, en el principio creó los cielos y la
tierra" (Génesis 1:1). Él solo es eterno y no ha habido tiempo en que
Dios, el tres en uno, no haya sido. Jesús se encarnó, tomó forma humana cuando
nació en un pesebre en Belén, pero ese no fue el inicio de su existencia. Dios
siempre ha sido Dios trino: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Él ya era antes de
que cualquier cosa fuese creada. Así que bastó con pronunciar su palabra, y el
universo existió a partir de la nada. La verdad en cuanto a si completó su obra
en seis días literales de 24 horas o en un período más largo, no importa. (Las
opiniones cristianas difieren acerca de cómo debemos interpretar Génesis 1.) Lo
que realmente importa es que Dios es el Creador de todas las cosas.
Dios el
Padre tomó la iniciativa. Génesis relata que el Espíritu también participó en
la creación: "…y el Espíritu de Dios iba y venía sobre la superficie de
las aguas" (1:2). El Nuevo Testamento enseña que Jesús, el Hijo de Dios,
fue el agente del Padre en la creación: "Por medio de él todas las cosas
fueron creadas; sin él, nada de lo creado llegó a existir" (Juan 1:3);
"…todo ha sido creado por medio de él y para él" (Colosenses 1:16).
La Biblia
destaca que Dios se agradó de lo que hizo. Después de cada día de labor
creativa, en Génesis, a excepción de los primeros dos, se dice: "Y
Dios…consideró que era muy bueno". Y cuando terminó el trabajo, el
escritor de Génesis comenta: "Dios miró todo lo que había hecho, y consideró
que era muy bueno" (1:31).
Esta
actitud hacia el mundo material difiere en gran manera de algunas filosofías y
religiones, centradas sólo en lo espiritual y en el alma. Cualquier otra cosa
se considera de segunda importancia y, en el peor de los casos, como diabólica.
Conciben que la salvación involucre al alma, la cual es rescatada de la prisión
del cuerpo para unirse al mundo inmaterial donde Dios mora. Pero la Biblia no
da lugar a tales perspectivas. No se nos permite considerar superior a lo
espiritual sobre lo físico. La materia importa porque Dios la creó, y "es
buena". Él se interesa no sólo en nuestras almas, sino también en nuestros
cuerpos y en el mundo donde vivimos. Como veremos en el siguiente capítulo, el
pecado humano arruinó todas las cosas en el mundo, tanto lo físico como lo
espiritual. En su gracia, Dios decidió poner de nuevo las cosas en orden, y
determinó hacer no sólo la mitad de la tarea, pues su plan salvífico incluye
todas las cosas, espirituales y físicas. Nuestra mirada al panorama total de la
Biblia nos llevará a un recorrido que va de la creación a la nueva creación.
Dios hizo todas las cosas en el principio y redimirá todas las cosas al final.
La Biblia nos lleva a una culminación en el cielo, porque esa es la culminación
de Dios para su mundo. En muchos sentidos eso nos llevará de nuevo al
principio, a la manera en que las cosas fueron diseñadas en el primer lugar, a
un nuevo Edén.
______________________________________
-
Vaughan Roberts, El Gran Panorama Divino
(2008), pág. 27-28, Torrentes de Vida.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario